Joan Manuel Serrat y Joaquín Sabina han iniciado su "contraataque" con un concierto en Zaragoza, el primero de su gira por España, que ha echado a volar en el mismo lugar donde hace cinco años comenzó "Dos pájaros de un tiro", pero esta vez para presentar su último álbum "La orquesta del Titanic".
Con el pabellón del Príncipe Felipe abarrotado -se vendieron unas 6.800 entradas-, Joan Manuel Serrat y Joaquín Sabina aparecieron en el escenario quince minutos después de la hora indicada, con traje negro y corbata, y agradecieron la presencia del público "con la que está cayendo", y "no solo de calor", bromearon.
Una orquesta que sonaba de lujo, capitaneada por Ricard Miralles y Pancho Varona, arropó a los dos pájaros con ganas de divertirse y de divertir.
Serrat instó al público a disfrutar de Sabina, "un buen tipo que dedica la mitad del día a meterse con la gente y la otra mitad a disculparse", porque "no sé cuánto durará". "Esperemos que muchos años, vamos a pedírselo a la Virgen del Pilar".
Tuvieron palabras de recuerdo para el fallecido José Antonio Labordeta, a quien Joan Manuel Serrat dedicó una de las canciones del cantautor "Esta tierra es Aragón".
Durante más de dos horas y media, Serrat y Sabina volvieron a sellar su alianza interpretando 28 temas, algunos de ellos de su nuevo álbum, e hicieron gala de su buen humor, intercalando breves monólogos.
Con el pabellón del Príncipe Felipe abarrotado -se vendieron unas 6.800 entradas-, Joan Manuel Serrat y Joaquín Sabina aparecieron en el escenario quince minutos después de la hora indicada, con traje negro y corbata, y agradecieron la presencia del público "con la que está cayendo", y "no solo de calor", bromearon.
Una orquesta que sonaba de lujo, capitaneada por Ricard Miralles y Pancho Varona, arropó a los dos pájaros con ganas de divertirse y de divertir.
Serrat instó al público a disfrutar de Sabina, "un buen tipo que dedica la mitad del día a meterse con la gente y la otra mitad a disculparse", porque "no sé cuánto durará". "Esperemos que muchos años, vamos a pedírselo a la Virgen del Pilar".
Tuvieron palabras de recuerdo para el fallecido José Antonio Labordeta, a quien Joan Manuel Serrat dedicó una de las canciones del cantautor "Esta tierra es Aragón".
Durante más de dos horas y media, Serrat y Sabina volvieron a sellar su alianza interpretando 28 temas, algunos de ellos de su nuevo álbum, e hicieron gala de su buen humor, intercalando breves monólogos.