Había gran expectación entre los asistentes por averiguar cómo se había captado la esencia del ingenioso cantautor en un espectáculo en el que él mismo ha colaborado seleccionando los temas musicales.
Por la alfombra roja han desfilado numerosas caras conocidas: Fernando Tejero, Adrián Lastra, Inma Cuesta, Ismael Serrano, Paloma San Basilio, Joan Manel Serrat, Pancho Varona y Miguel Bosé, entre muchos otros, contando también con la presencia del gran protagonista de la noche, Joaquín Sabina.
Después de que todos se acomodaran en sus butacas se encendieron los focos del escenario. Entre una nebulosa apareció Samuel (Víctor Massán) que inauguraba la función con sonetos sacados de las letras de Sabina. Después con el tema “Pastillas para no soñar” daba la bienvenida al Darlins, un bar de barrio de dudosa reputación donde las señoritas que hacen las calles alternan y coquetean con los clientes.
El bar lo regenta Juan (Juan Pablo di Pace) y su novia Magdalena (Guadalupe Lancho) que hace ya tiempo dejó la prostitución para ayudarle en el negocio. Hoy reciben la visita de “El Tuli” (Álex Barahona) que sale de prisión después de tres años. Juan y él, junto a Samuel se dedicaban la vida cometiendo delitos cuando un día, por un chivatazo, apareció la policía. El peor parado fue Samuel que acabó muriendo de un disparo.
De poner el punto cómico se encarga “El manitas” (Diego Paris), un muchacho poco espabilado de gran corazón, al que engañan fácilmente y el más débil de la pandilla. Sus continuos intentos de hacer las cosas bien y de parecer uno más arrancaron más de una risa entre los asistentes y fue uno de los más aplaudidos de la velada.
Esta historia habla de juego socio, de trampas y canallas, de macarras y timadores. de la seducción como arma y del amor por interés. Pero en la otra cara de la moneda se perfilan los buenos sentimientos, la creencia de que la amistad vale tanto que hasta hay que dejarse matar por ella y también que el amor de verdad es el que duele en el corazón.
Las canciones de Sabina han sido elegidas cuidadosamente para formar un engranaje perfecto con la historia. Se han podido escuchar algunas de las más populares del cantautor como “El pirata cojo”, “Conductores suicidas”, “Yo quiero ser una chica Almódovar”, “¿Quién me ha robado el mes de abril?” o “Tan joven y tan viejo”, entre otras. Todas han sido versionadas dando lugar a una multitud de géneros musicales dentro del espectáculo. Desde el pop se salta al swing pasando por la salsa, la balada o el flamenco. Tampoco faltan los ritmos cabareteros, de couple y de claqué. Es en este punto donde se demuestra que para crear MÁS DE 100 MENTIRAS se ha contado con el trabajo de nueve arreglistas diferentes. Lo mismo sucede con las coreografías, salvadas en el escenario por un cuerpo de baile formado por 15 personas.
“Y nos dieron la diez y las once, las doce y la una y las dos y las tres…” despidió la función entre aplausos y ovaciones al elenco que salió a saludar en contadas ocasiones. Con toda la compañía en escena, el productor José María Cámara ha leído una carta llena de sentimiento y posteriormente Joaquín Sabina ha aparecido en escena dedicando unas palabras al público y a la compañía. “Es la primera vez que me aplauden sin cantar, esta noche estoy muy orgulloso de vosotros”, ha exclamado.
MÁS DE 100 MENTIRAS se ha estrenado en Madrid dispuesto a repetir el éxito de sus antecesores HOY NO ME PUEDO LEVANTAR y 40 EL MUSICAL. Si en el resto de funciones el público reacciona de la misma manera que la noche del estreno, seguro que lo conseguirá.
Fuente: CIUDAD SABINA-TodoMusicales
Por la alfombra roja han desfilado numerosas caras conocidas: Fernando Tejero, Adrián Lastra, Inma Cuesta, Ismael Serrano, Paloma San Basilio, Joan Manel Serrat, Pancho Varona y Miguel Bosé, entre muchos otros, contando también con la presencia del gran protagonista de la noche, Joaquín Sabina.
Después de que todos se acomodaran en sus butacas se encendieron los focos del escenario. Entre una nebulosa apareció Samuel (Víctor Massán) que inauguraba la función con sonetos sacados de las letras de Sabina. Después con el tema “Pastillas para no soñar” daba la bienvenida al Darlins, un bar de barrio de dudosa reputación donde las señoritas que hacen las calles alternan y coquetean con los clientes.
El bar lo regenta Juan (Juan Pablo di Pace) y su novia Magdalena (Guadalupe Lancho) que hace ya tiempo dejó la prostitución para ayudarle en el negocio. Hoy reciben la visita de “El Tuli” (Álex Barahona) que sale de prisión después de tres años. Juan y él, junto a Samuel se dedicaban la vida cometiendo delitos cuando un día, por un chivatazo, apareció la policía. El peor parado fue Samuel que acabó muriendo de un disparo.
De poner el punto cómico se encarga “El manitas” (Diego Paris), un muchacho poco espabilado de gran corazón, al que engañan fácilmente y el más débil de la pandilla. Sus continuos intentos de hacer las cosas bien y de parecer uno más arrancaron más de una risa entre los asistentes y fue uno de los más aplaudidos de la velada.
Esta historia habla de juego socio, de trampas y canallas, de macarras y timadores. de la seducción como arma y del amor por interés. Pero en la otra cara de la moneda se perfilan los buenos sentimientos, la creencia de que la amistad vale tanto que hasta hay que dejarse matar por ella y también que el amor de verdad es el que duele en el corazón.
Las canciones de Sabina han sido elegidas cuidadosamente para formar un engranaje perfecto con la historia. Se han podido escuchar algunas de las más populares del cantautor como “El pirata cojo”, “Conductores suicidas”, “Yo quiero ser una chica Almódovar”, “¿Quién me ha robado el mes de abril?” o “Tan joven y tan viejo”, entre otras. Todas han sido versionadas dando lugar a una multitud de géneros musicales dentro del espectáculo. Desde el pop se salta al swing pasando por la salsa, la balada o el flamenco. Tampoco faltan los ritmos cabareteros, de couple y de claqué. Es en este punto donde se demuestra que para crear MÁS DE 100 MENTIRAS se ha contado con el trabajo de nueve arreglistas diferentes. Lo mismo sucede con las coreografías, salvadas en el escenario por un cuerpo de baile formado por 15 personas.
“Y nos dieron la diez y las once, las doce y la una y las dos y las tres…” despidió la función entre aplausos y ovaciones al elenco que salió a saludar en contadas ocasiones. Con toda la compañía en escena, el productor José María Cámara ha leído una carta llena de sentimiento y posteriormente Joaquín Sabina ha aparecido en escena dedicando unas palabras al público y a la compañía. “Es la primera vez que me aplauden sin cantar, esta noche estoy muy orgulloso de vosotros”, ha exclamado.
MÁS DE 100 MENTIRAS se ha estrenado en Madrid dispuesto a repetir el éxito de sus antecesores HOY NO ME PUEDO LEVANTAR y 40 EL MUSICAL. Si en el resto de funciones el público reacciona de la misma manera que la noche del estreno, seguro que lo conseguirá.
Fuente: CIUDAD SABINA-TodoMusicales