Hace dos años y tres días que el de Úbeda arrasó en el mismo escenario, la Huerta del Obispo de Alcalá. Aquella noche, Joaquín Sabina se jactó de haber conseguido "lo que no logró Cervantes".
Ayer, más de 8.000 personas vivieron y disfrutaron del concierto del Flaco y Cia.
Sabina es Sabina en cualquier de sus registros y más si le acompaña su inseparable Pancho Varona, que ha dejado colgado un mensaje en facebook "Buenos días! Todo bien, el chou en Alcalá fue fantástico! Luna casi llena, recinto casi lleno, muchísima gente, todo perfecto. Gracias de todo corazón, ojalá que volvamos a vernos!"...esas redes sociales que ayer despreció Sabina, como esta semana lo hizo Calamaro. Y, aunque el concierto duró más de dos horas, la actuación del irreverente trovador jiennense resultó corta.
Se despidió casi a la una de la mañana, después de que dieran las diez y las once, y también las doce, con Pastillas para no soñar, porque su música va a lograr vivir cien años probando los licores del placer que sigue proporcionando la letra de sus canciones.
Ayer, más de 8.000 personas vivieron y disfrutaron del concierto del Flaco y Cia.
Sabina es Sabina en cualquier de sus registros y más si le acompaña su inseparable Pancho Varona, que ha dejado colgado un mensaje en facebook "Buenos días! Todo bien, el chou en Alcalá fue fantástico! Luna casi llena, recinto casi lleno, muchísima gente, todo perfecto. Gracias de todo corazón, ojalá que volvamos a vernos!"...esas redes sociales que ayer despreció Sabina, como esta semana lo hizo Calamaro. Y, aunque el concierto duró más de dos horas, la actuación del irreverente trovador jiennense resultó corta.
Se despidió casi a la una de la mañana, después de que dieran las diez y las once, y también las doce, con Pastillas para no soñar, porque su música va a lograr vivir cien años probando los licores del placer que sigue proporcionando la letra de sus canciones.